Recientemente
los medios de comunicación informaron del Acuerdo parcial sobre la crisis siria, alcanzado por los Estados
Unidos y Rusia, el 14 de septiembre en Ginebra, para que Damasco entregue y
destruya el armamento químico en su poder, antes de mediados de 2014. El
Acuerdo se alcanzo de forma accidental,
en ocasión de una conferencia de prensa
en Londres, en la cual , ante la pregunta de cuál sería la manera en que se podría conjurar el anunciado ataque
a Siria, de un periodista; el Secretario de Estado, norteamericano John Kerry,
cándidamente contesto, que entregando las armas químicas. Ante semejante
oferta, el Ministro de Relaciones
Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, anunció que
“su país estaba
dispuesto a presionar a Siria para que aceptase la idea de poner su arsenal
químico en manos de la comunidad internacional”. La
propuesta rusa dejó a la Casa Blanca ante la disyuntiva de defender su estrategia belicista y desautorizar al Secretario de Estado, o estudiar las bondades y desafíos de la oferta, que de paso recibía el aval
sirio y de la ONU en la persona de Ban ki-Moon. Finalmente, Estados Unidos
acepto la propuesta de Moscú, renunciando
al publicitado ataque contra
Siria.
VALORACION
Por Rusia:
1)
La propuesta rusa puso en evidencia las reales
intensiones de Washington, respecto a su
objetivo estratégico con el ataque. Es
decir, si simplemente se trataba
de disuadir y degradar la capacidad del gobierno sirio para lanzar ataques
químicos, o en realidad se trataba de cambiar la correlación de fuerzas
militares en el terreno. Estados Unidos se vio obligado a aceptar la propuesta,
pues de otra manera, sus intenciones reales
quedarían al descubierto;
2)
El Acuerdo negociado con Estados Unidos permitió que Washington renunciara a establecer la autoría y
responsabilidad del ataque químico del 21 de agosto y que
aceptara también retirar del proyecto de Resolución, una referencia a
que el régimen sirio respondiese por ese crimen ante la justicia internacional;
3) Moscú,
logro que cualquier alusión a la amenaza
del uso de la fuerza en la Resolución
del Consejo de Seguridad, quede
subordinada a una nueva votación del Consejo, con lo cual logra
conservar el derecho a la última palabra para la autorización de un ataque.
4) Desde
el colapso de la Unión Soviética, el
Acuerdo reposiciona a Rusia como participante clave en el Medio Oriente, que no
abandona a sus aliados.
Por Estados Unidos:
1)
La oferta rusa permitía a la Casa Blanca corregir de
mala gana, un posible descalabro en el Congreso, ya que Obama, ante la imposibilidad de
ofrecer garantías de que al final del
ataque, no se terminara favoreciendo a Al Qaeda; no tenía la
certeza de votos suficientes, que le permitiera autorizar la medida;
2) La oferta, le permitía a Washington escoger
entre destruir por medio de ataques las
plantas donde se almacenan y
producen toneladas de armas químicas, lo
que implicaba un riesgo grandísimo de
desatar un accidente que terminara
produciendo más víctimas inocentes de las que se inculpaba al régimen
por el uso de armas químicas, o recibir
las armas, con solo amagar el ataque;
3) El
Acuerdo le facilitaba decidir, entre
destruir sin la seguridad de lograrlo,
los medios utilizados por Siria para diseminar las armas químicas, que de hecho, ya habían sido reubicados por Assad, en lugares poblados, o aceptar la
oferta de entrega del armamento químico, sin disparar un tiro;
4) El
Acuerdo ofrece a Washington
la ventaja, de a priori, aplicar el guión iraquí a la solución del
problema sirio, puesto que permite un desarme programado del gobierno de Assad,
antes del asalto final, si así lo
decide. Baste recordar, que previo a su rendición en 1991, Estados Unidos ya había conseguido no solo aplicarle fuertes
sanciones económicas a Bagdag, sino
también desarmar parcialmente a Sadam
Husein, cuando este aceptó entregar para la destrucción, sus armas químicas. A la postre, tal medida le impidió hacer uso del
arma más letal de su arsenal;
5) Según
Washington, que “al Asad haya terminado por reconocer la posesión de armas
químicas y aceptar su eliminación no se debe ni a la sagacidad política de
Putin, ni a la torpeza diplomática de John Kerry, sino a la credibilidad de la
amenaza del uso de la fuerza formulada por Obama”. En otras palabras,
Washington demostró que la única forma
que la Diplomacia (zanahoria), tenga alguna opción de funcionar, es de que este unida a una amenaza militar creíble
(garrote);
6) Para
Estados Unidos la propuesta es válida,
porque al contar con la capacidad de
despojar a Siria de sus armas químicas,
conjura su uso fatal contra
Israel, país que según un informe de hace pocos días en la revista Bulletin of the Atomic
Scientists, asegura que cuenta con 80 cabezas atómicas;
7) Según
Estados Unidos el acuerdo no significa que se descarte definitivamente la posibilidad
de una intervención militar de forma unilateral, sino que le aporta argumentos
para defender la tesis, de que agoto todos los medios pacíficos disponibles para resolver el
conflicto.
VENTAJAS
1)
A
pesar de todas las diferencias sobre la cuestión siria, el Acuerdo demostró que Obama y Putin profesan
un temor común: no desean que Damasco
caiga bajo el control de
fundamentalistas religiosos;
2)
La necesidad de la implementación
de un alto el fuego, para poder implementar el Acuerdo, creara condiciones favorables para considerar
una salida pacífica del conflicto;
3)
El Acuerdo pone
en entredicho la voluntad de paz
de países como Egipto e Israel,
dos de los seis Estados del mundo, que no han firmado la Convención sobre Armas
Químicas, que prohíbe la producción y almacenamiento de ese material.
PROBLEMAS
DEL ACUERDO
1) Resultara
difícil retirar el arsenal químico del gobierno sirio con éxito, sin la
implementación de un alto el fuego, que permita la labor de inspectores
internacionales;
2) El
desmantelamiento de arsenales químicos
no se puede completar en semanas o meses. La experiencia de Irak habla
por sí sola. Luego de que Sadam
Husein aceptara entregar para su destrucción su arsenal
químico, se necesitaron casi tres años de trabajo (1991 a 1994),
con un gobierno que se había rendido, y sin estar en medio de una guerra
civil. En el caso sirio, según el Acuerdo, se establece a lo sumo un año de plazo;
3)
Los
dos temas claves del Acuerdo son la
seguridad de los inspectores y en particular,
la cuestión de la verificación. Si este último punto no se esclarece de manera
suficiente, en el futuro, será causa de seria
controversia;
4)
El Acuerdo deja
sin resolver el problema más importante,
lograr poner fin una guerra civil que supera las 100.000 víctimas
mortales, dos millones de refugiados, la destrucción de ciudades enteras y la
posibilidad de que el conflicto se
desborde sub-regionalmente. La
solución de este dilema, vía pacifica o militar, constituirá el punto crucial
de cualquier tratamiento futuro de la cuestión siria
BENEFICIARIOS
1) El Acuerdo
tácticamente favorece al régimen de al Assad, porque de momento conjuró el
ejercicio del uso de la fuerza en su contra;
2) El Acuerdo
tiene la ventaja de evitar que las armas químicas sirias, caigan en manos de organizaciones radicales
enemigas de Israel;
3) El Acuerdo
tiene la ventaja para Israel de que no lo obliga a desmantelar su arsenal químico;
4) El Acuerdo
tiene la ventaja de proteger al pueblo
sirio, de un ataque de represalia con armas químicas por parte de Israel.
PERJUDICADOS
1)
El Acuerdo estratégicamente perjudica al gobierno
de al Asaad, pues pone término abrupto a su
principal seguro de vida.
CONSECUENCIAS
1)
La necesidad de
que los rebeldes sirios estén obligados
a colaborar en la seguridad de los inspectores internacionales y por lo tanto,
tengan que contener su ofensiva, de forma indirecta, favorece la permanencia de Bachar al Asad en el poder;
2)
De ahora en
adelante, Israel no podrá bajo ningún pretexto sustentar la mantención de su
arsenal químico, por lo que deberá deshacerse
del mismo;
3)
Israel podría eventualmente destruir su arsenal químico, pero no cederá un ápice,
en cuanto a su potencial nuclear, pues su poder ofensivo no se limita a la defensa contra los países árabes o musulmanes sino que apunta contra cualquier otro país, que en el
futuro desafíe su hegemonía.
4) La
acción de Estados Unidos, potenciará el accionar autónomo de al Qaeda en Siria, desencadenara una injerencia descarada
en la guerra civil de ese país por parte
de Arabia Saudí, Qatar y Turquía que se
consideran traicionados por el Acuerdo y
aumentara la beligerancia independiente de Israel,
respecto a Irán;
5) La tarea
de fijar con credibilidad el número y tipo
de armas y como esto pueda
afectar la marcha del conflicto,
es una incógnita. Nada excluye que el trabajo de los inspectores
internacionales pueda ser interpretado
por el gobierno sirio, como una invasión disfrazada;
6) Los países occidentales se
involucraran militarmente con mayor profundidad en el conflicto sirio, de que lo que lo hicieron en el conflicto
afgano durante la invasión soviética;
7) El
conflicto en Siria exigirá cada vez más, el uso de armamento sofisticado y personal altamente
calificado, lo que conducirá al
involucramiento militar directo de las
principales potencias en el conflicto
sirio.
8) El nivel alcanzado en el escalamiento del conflicto le demostró a Irán, que la amenaza militar por parte de Estados Unidos en la región,
es verosímil y por tanto, forzara a Teherán a modificar su lenguaje confrontacional y conducta desafiante.