Creo que es fundamental modificar la ideología que ha convencido a la mayor parte de la población que el modelo capitalista es el único posible y viable, tras los fracasos estrepitosos de los modelos socialistas. Pues no es así. Los distintos socialismos adolecían del mismo mal que el capitalismo: centrarse en el productivismo y la búsqueda del lucro, aunque fuese social. Este mal aqueja a ambos modelos porque los dos son hijos del mismo modelo general, que a su vez pende de la misma consideración de la historia y la sociedad. Ambos pretenden que el hombre se construye a base de producir y, supuestamente, progresar. En uno de los capítulos de No podéis servir a dos amos. Crisis del mundo, crisis en la Iglesia (páginas 180-182) relato el proceso que nos lleva al capitalismo desde la economía del don. Conocer este proceso nos puede liberar de la falacia ideológica. Invito a su lectura a continuación.