Es como la representación de la crueldad: quitarle un caramelo a un niño, y sin embargo el Senado votará esta semana un proyecto de ley que prohíbe la venta en colegios, universidades, institutos y otros establecimientos educacionales de chocolates altos en calorías (prácticamente todos), dulces, caramelos, golosinas, etcétera; así como también de alimentos con alto contenido de sal (papas fritas, ramitas y similares).