Resulta
imposible negar que, tanto la ignorancia del mexica contemporáneo, como la
irresponsabilidad e interés nulo por parte de la institución gubernamental a la
que le ajuste el saco, pueden ser perfectamente representada por dos icónicas
frases –arrabaleramente aderezada por dos de los peores rostros que Televisa se
ha atrevido a brindarnos- “¡Que pase el desgraciado!” y “Mi compromiso es con
México”, ¿a poco no?
Las
similitudes entre Laura Bozzo –Bozo como el payaso pero con doble zeta y sin un
ápice de gracia y/o dignidad- y nuestro futuro presidente Enrique Peña –Peña
como el sinónimo de vergüenza pero con eñe y sin un solo grado de credibilidad-
son presumibles, ambos fueron acogidos por la televisora más poderosa de
América Latina, ambos abusan de las necesidades de un pueblo por demás
maltratado, ambos se autoproclaman defensores de los pobres y salvaguardas de
los más necesitados y, ambos representan un retroceso cultural e intelectual de
dimensiones monumentales. Por fortuna para la mexicanada, solo uno de ellos
posee el poder suficiente para silenciar las voces que se atrevan a dejar al
descubierto sus bajezas.
Laura
–quien presume una intachable entereza humana- debería estar increpando la
incapacidad judicial del país que le abrió los brazos en lo tocante al tema de
la guardería ABC –entre muchos otros- que, después de demasiados años, solo pudo
dictar auto de formal prisión a nueve personas, mientras que Enrique –quien se
jacta de ser aquel a quien el “pueblo” colocara digna y “democráticamente” al
frente de una nación- debería estar más urgido por aclarar aquellos temas que
le fungen como históricos lastres –la niña Paulette, los feminicidios
irresolutos del Estado de México, el caso de Agustín Humberto Estrada Negrete y
Atenco entre muchos más- que haciendo declaraciones erráticas en torno a los
triunfos de nuestros atletas en las olimpiadas.
México
no tiene ni al gobierno ni al entretenimiento que se merece, tiene los que por
años le han sido impuestos desde las sillas más caras de la nación.
¿La
broma de la semana?, el gobierno persiguiendo militares retirados, luego de
seis años de una “guerra” contra las instituciones criminales, ¿y los vigentes
cuando?