De La
Afilada Navaja De
Ockham –en edición internacional, titulada la primera: La oculta demencia
policial-de Ignacio Fernández Candela (Ignacio F. Candela), uno de mis
compañeros colaboradores de LetrasTRL, ya han sido publicadas la primera y
segunda parte, además de otras obras noveladas y poéticas. He recogido de Facebook la
información sobre obra y autor; ¿cómo podremos clasificar a este artista que es
escritor, pintor y crítico literario; analista socio-político, ensayista, novelista
y además es poeta?, de él podríamos decir que es como aquellos creadores
pertenecientes al Renacimiento, que practicaron todas las disciplinas
artísticas dotando a su carácter del eclecticismo propio de su época; quizás a
F. Candela le falte por poner en practica la faceta musical para ser un
verdadero ecléctico. Lo veremos en esta entrevista, a la que, amablemente, ha
accedido nuestro compañero.
Marcos Morneo. (MM)
Hola
Ignacio, bienvenido a LetrasTRL: ¿Es su novela una historia real?
Ignacio F. Candela.
(IFC)
Muchas gracias,
Marcos. La afilada navaja de Ockham I.
Contra el abuso policial, en defensa de los derechos del ciudadano de bien,
es una novela documental, de carácter autobiográfico, cuya creatividad
literaria fue impelida por un intimista afán de justicia, después de vencer un inopinado infierno basado en el
error y, lo que es peor, un posterior abuso policial ejercido para intentar
solapar los dislates de cuatro agentes conchabados aun a costa de arruinar la
vida de un ciudadano inocente.
MM:
¿Por qué La Afilada
Navaja de Ockham?
IFC:
Porque es el argumento que permitió
defenderme contra cuatro principios de veracidad usados malintencionadamente para
engañar a la Justicia
y destruirme la vida. El postulado de razonamiento lógico de Guillermo de
Ockham en el siglo XIV, me sirvió como defensa, entre otros argumentos, para
demostrar mi inocencia y cambiar las tornas; de tal manera que, además de ser
absuelto de toda culpa, actualmente son tres de los cuatro agentes corruptos
los que esperan juicio imputados de 5 delitos, entre ellos el de detención
ilegal. “Ante la confluencia de varias hipótesis las más sencilla es la cierta”,
fue la teoría como instrumento de veracidad para no salir perjudicado en lo que
en principio parecía un infierno personal con definitivas consecuencias.
MM:
¿Qué hay de biográfico en esta novela?
IFC: La
visceral descripción de lo acontecido y el intimista desarrollo de la
argumentación novelada, cuya transparencia radica en las vivencias que han
forjado ,de manera inusitada, mi espíritu de lucha e improvisada resistencia
ante avatares de calado destructivo pero
con las consecuencias más positivas. Una de las enseñanzas que se sonsacan de
esta obra jurídica y personalmente práctica es que la adversidad conlleva la
semilla de mayores beneficios; frase de Napoleon Hill que cobra consistente
vigencia en las letras de esta sorprendente autobiografía. Digo sorprendente
porque jamás pensé que algo de este calibre podría suceder en mi existencia. Todo
está descrito con los documentos originales para acentuar la realidad que
supera a la ficción.
MM:
¿Cómo se le ocurrió la idea de escribir esta novela?
IFC: Por
la indignación personal de lo vivido y el impulso de advertir sobre una
problemática demasiado frecuente, cuyo drama sólo percibe el afectado y su
entorno familiar y de amistades. Nadie está exento de sufrir esta laberíntica
pesadilla. Me consta que hay muchas personas inocentes que terminaron
injustamente en la cárcel o suicidadas. Asimismo, es un homenaje y está dedicado a las
mujeres y hombres que integran las Fuerzas de Seguridad del Estado, consciente
de que las sombras de los menos nunca oscurecerán la grandeza y la calidad
humana de la mayoría.
MM:
¿Qué hace cuando no escribe?
IFC:
Practico aficiones inherentes al común tiempo libre de mis amistades.
Itinerarios en moto, excursiones en contacto con la Naturaleza y muchas
actividades en que puedo incluir la pintura con un desarrollo artístico de
carácter profesional con más de treinta exposiciones de mi obra. Del mismo
modo, y para darte la razón sobre ese carácter ecléctico que generosamente me
has adjudicado en la introducción, no parece que lleva cuando canto y con el estilo personal
que procuro imprimir en mi obra literaria y pictórica.
MM:
¿Qué novela le gustaría escribir después
de La Afilada Navaja
de Ockham?
IFC: Ya
está escrita y espero la publicación en breve por parte de una Editorial de
Miami. Buscando la edición internacional encontré La afilada navaja de Ockham I
publicada en Illinois-Chicago (Estados Unidos) gracias a mi editora de Shared
Pen: Rosy Hugener. En esta ocasión se publicó con el título de La oculta
demencia policial. Continuando con la publicación en Estados Unidos, está en
proceso de edición una novela intitulada: “La pequeña puerta del Cielo”, que ha
sido considerada de merecimiento para invertir por ella de cara a la
distribución de carácter internacional. Editoras como la de Apalossa Editorial,
consideraron dicha novela de mayor calidad que muchos de los best sellers
actuales y honradamente creo que posee todos los factores propios de las buenas
obras para llegar al potencial lector. Trata todas las problemáticas que
actualmente nos preocupan en el mundo, incluida la amenaza de un conflicto
nuclear en unos tiempos de crisis en que muchos lo han perdido todo.
Antes
publiqué un ensayo-como continuidad de esa búsqueda de Justicia que contiene La
afilada navaja de Ockham I-, pero con referencias de ámbito nacional en cuanto
a la situación política y económica generada durante estos últimos años. La afilada navaja de Ockham II. Usar el
sentido común ante la evidencia criminal, cuenta con numerosas referencias
por la Red, al
igual que mi nombre de autor.
También
he publicado dos libros de poesía: “Cuerpos rotos, almas muertas” y “Mar de
ausencias y encuentros” con Pilar Remartínez Ediciones y he participado en
varias antologías poéticas.
MM:
Un personaje y libro preferidos...
IFC: Un
libro que marca profundamente el aliento literario propio por la confluencia de inspiraciones
profundamente personales es El lobo estepario de Hermann Hesse y por lo tanto
su personaje principal: Harry Haller, el lobo estepario que es una vindicación
existencial del propio autor.
MM:
Su sueño como escritor.
IFC:
Traspasar la frontera de la masificación y encontrar profesionales de la edición
conscientes de que la búsqueda del talento nunca hay que darla por terminada.
MM:
Una cita que le haya cambiado la vida.
IFC: La conducta es la única prueba de la
sinceridad de nuestro corazón. Thomas Rees Wilson. Premio Nobel de Física
en 1926.
MM:
Tres libros que se llevaría a una isla desierta.
IFC: La Biblia, por su
trascendencia más allá de la ignorancia de la siempre inexacta sabiduría
humana. El lobo estepario, para recordar la fortaleza de nuestras debilidades,
pese a todo; la existencia no deja de ser un gran mérito para miles de millones
de seres abocados a la apariencia de la extinción; El Quijote, un gran “todo en
uno”, donde siempre existe un nuevo referente que es capaz de transformar la
visión de cada lectura con nuevas trascendencias. Si existiera un manual tipo:”Cómo
vivir prácticamente en una isla desierta” también me lo llevaría, pero no lo
cambiaba por ninguno de los otros tres; soy más idealista que pragmático.
MM:
Su método para escribir ¿El orden o el caos?
IFC: Creo
que la ordenación de la idea es una quimera, máxime cuando la inspiración es
una cualidad intuitiva de la que desconocemos sus verdaderos procesos de
producción desde sus orígenes; es decir, desde el momento en que se inicia todo
antes de trascribirlo con la letra. Usamos instrumentos para llegar a la
esencia y usamos los sentidos para percibirlos, pero nada es esencial sino a la
lucubración de la grandeza del alma que no podemos calibrar. De ahí nace esa
maravilla del caos en que lo ignorado nos da capacidad creativa.
El caos puede estar ordenado a pesar de las
apariencias o el orden aparente ser un caos. Sólo el alma es capaz de conocer
el mecanismo que nos permite instrumentalizar algo tan intangible como la idea para
plasmarla como pensamiento comunicador. En un proceso que siempre será incierto,
intangible pero milagrosamente posible, lo importante es que sucede.
MM:
Lo que le cambiaría la vida.
IFC:
Creo que todo tiene su momento e igual que existe un tiempo para el aprendizaje
de lo terreno, también habrá una dimensión perfecta en que sabremos vislumbrar
el porqué de está efímera transición donde nada es perfecto. Creo que todo está
atado y bien atado.
MM:
Lo que leería tantas veces como pudiese.
IFC: “Para
entrar en el reino de los Cielos, interior, debéis ser como niños” de
Jesucristo.
MM:
Tiene un lugar preferido para escribir.
IFC:
Creo que el lugar no importa pues afortunadamente esa desconocida inspiración
del orden o del caos me acompaña esté donde esté. Suelo escribir de continuo y
sin pausas y tampoco sujeto a modificaciones. El poemario “Cuerpos rotos, almas
muertas” lo escribí en dos días, con papel y bolígrafo que me acompañó en la
mesilla de noche con la idea porfiando
por surgir del sueño. Sólo tenía que captarla encendiendo la luz y garabateando
una imposible caligrafía. La novela de 300 páginas, La pequeña puerta del Cielo,
fue finalizada en once días frente a la pantalla del ordenador. Lo importante
es la motivación por producir, lo demás llega solo.
MM:
Qué filosofía aplica en su vida como artista y escritor.
IFC: La
gratitud por poder compartir con mis semejantes ese complicado proceso creativo
que deviene de la siempre desconocida inspiración. Luego la originalidad y el
trabajo bien desarrollado, con el conocimiento que evoluciona desde la
experiencia de lo aprendido.
MM:
¿La aventura o el sosiego?
IFC: En
ocasiones la aventura hastiado del sosiego y en otras el sosiego cansado de la
aventura.
MM:
La decadencia es…
IFC:
Todo aquello que involuciona y provoca caducidad en los valores que siempre
deberían ser permanentes.
MM:
La felicidad es...
IFC: Un
horizonte donde ha de prevalecer el valor de la grandeza de los pequeños
detalles. Creo en la felicidad de lo satisfactoriamente íntimo. En este mundo
nos extraviamos con demasiadas referencias de lo presumiblemente feliz y no
captamos lo importante y que pasa inadvertido; esa impercepción es frustrante
pero siempre tenemos la oportunidad de cambiar el prisma del conformismo, de lo
resignado, y dar importancia a lo que verdaderamente puede satisfacernos con
sencillez.
MM:
¿Qué opina de los bestseller y de los escritores que los producen?
IFC: Es
una circunstancia lógica de un mercado competitivo en que priman las ventas, a
veces por encima de la calidad literaria del autor. Seguro que un escritor que
se nutre de sus éxitos jamás criticará el sistema. Hay que alcanzar la meta
para apreciarlo, en tanto no deja de ser el horizonte imposible de otros
autores frustrados.
MM:
¿Qué opinión le merece la literatura que se hace actualmente?
IFC: Es
una literatura producto de la masificación. Lo literario atrae la masa cuando
en otros tiempos no era la masa la destinataria de lo literario. Hoy en día el
lector se aglutina en grupos específicos que tienden a la especialización temática.
De ahí la ingente producción dirigida a un potencial lector cuyos favoritismos
influencian la creación.
La esencia literaria de perfil puro se ha
ido perdiendo. Entonces el carácter de la obra implicaba el reflejo del autor
en las letras y hoy manda la literatura de la imaginación sin
rúbrica personal ni trascendencia de autor. Cuanto más se ha especializado el
lector en favorecer la demanda de lo temático, más se ha diluido la razón de
ser de la reivindicación de autor.
MM:
¿Cree que la Literatura
también está en crisis?
IFC: La crisis es una
generalización que potenciamos día a día y el mundo de la Edición también lo acusa. Si
basamos el juicio en la resta pecuniaria es obvio que existe cierta disfunción
en la consecución de objetivos económicos. Sin embargo, el patrimonio de la Literatura universal es
un sólido valor que permanece aunque los tiempos actuales muestren sus
carencias. ¿Cómo decir que la
Literatura está en crisis cuando su legado es universal,
permanente y nos sobrevive más allá de lo efímeramente circunstancial? El arte
literario usa el mecanismo de la edición para propalarse pero, una vez que lo
consigue, pasa a ser un legado intemporal por encima de cualquier momento crítico.
MM:
Quiero agradecerle su tiempo, y para terminar me gustaría hacerle una última
pregunta: ¿qué es para usted la realidad?
IFC: Es una quimera
como lo quimérico puede ser una realidad. Vivir en una mota de polvo terrena
que pertenece a un Universo infinito en expansión parece una realidad, pero
seguro que siendo tan pequeños en una dimensión tan excelsa en algún momento
hemos perdido la noción de lo que quizá incorrectamente denominamos real.
Algo se nos escapa con tanta excelsitud y
quizá pertenecemos a una creación imaginativa donde todo parece muy real, siendo
sencillamente todo solo imaginación. Ya lo explicaba Platón con el Mito de las
cavernas o Calderón de la Barca
con la vida es sueño. Lo cierto es que todos podemos preguntarnos sobre ello
pero sólo los que se fueron se habrán respondido el interrogante que aquí
siquiera sabemos si realmente llega a responderse. Todo es demasiado complejo,
así que prefiero la frase de Jesús: “hay que ser como niños para entender”.
Muchas gracias,
Marcos. Agradezco a la revista Letras la oportunidad de manifestarme como
autor.
Ignacio Fernández Candela, Escritor-Columnista-Crítico-Consejero Editorial.
Muchas gracias por sus amables palabras. Me alegro de que le gustara el libro editado con Shared Pen en EEUU.
La pasión y el humor, basado en una acerada ironía de la que no puedo prescindir viendo cómo es este mundo, caracteriza siempre mi creación.
Ya ha salido publicada "La pequeña puerta del Cielo", tanto en España como en edición de EEUU que se puede encontrar en Amazon.com.
Encantado de saludarle.
,
Las obras de Ignacio Candela son excelentes. No solo escribe con pasión sino también con un estilo único y divertido. Gracias Ignacio por darnos la oportunidad de leer tus libros. Yo vivo en USA y me dio mucho gusto poder encontrar su libro” La oculta demencia policial” aquí. Suerte con tu nuevo libro.
Ignacio Fernández Candela, Escritor-Columnista-Crítico-Consejero Editorial.
Muchas gracias, María. Encantado de tu amistad, Alteza. Un beso.
Ignacio Fernández Candela, Escritor-Columnista-Crítico-Consejero Editorial.
Una vez comunicado y aclarado todo con Reeditor, denuncio la manipulación por parte de Facebook y Google sobre las pulsaciones, como baremos de aprobación de los lectores, en comunicados de LA VERDAD OCULTA DE NUEVA RUMASA Y OTRO ARTÍCULOS OPINIÓN.
Los marcadores se han puesto a cero en comunicados de alcance mediático, en tanto en artículos de opinión tales pulsaciones siguen existiendo.Se han borrado cientos de "Me gusta", pulsados por los lectores, con clara intención manipuladora.
María (Oscura Forastera), Letras
Magnífica entrevista, les felicito. Tan solo agregar un comentario. Aquí conocemos un poco más a este tremendo escritor pero he de decir que su bondad, compañerismo, su entrega hacia los demás, sin egoísmos hacen de Ignacio F. Candela, una persona singular y maravillosa. Esto lo digo pocas veces, hoy por hoy, doy gracias a Dios, por tener su amistad. Un beso mi lord.