Entre 2003 y
2011 murieron 605 mujeres a causa de la violencia machista.
Todos los
violentos verbales y/o físicos, solo les importa el sometimiento y control del
otro, intentando anular la voluntad, poco a poco van destruyendo las ilusiones,
los sueños, se destierra la alegría del rostro, instalando la resignación ante
una rutina áspera y desquiciante, exigiendo cada vez más complacencia, cuando
la alegría cada vez es menos. El objetivo del agresor es volver a la otra parte
tan o más inseguro que ellos mismos, intentando que permanezca deseoso de su
aceptación, sin poder decidir sobre su tiempo, perdiendo su individualidad,
acomodándose a sus horarios, estilo de vida y gustos.
Hay casos en
los que creen que se les debe agradecimiento, volviendo al otro ensimismado.
Los agresores creen que sus logros son importantes, pero si la pareja triunfa
reacciona con fastidio, mal humor, trato con empujones disfrazados de caricias. La
violencia es cíclica, hay descalificaciones, menosprecio, golpes, control,
rechazo, ofensas, infidelidades, prohibiciones, ironías, mentiras, sátiras, las
palabras se dicen con sarcasmos y con frases peyorativas del otro. Se siembran
los resentimientos. Los episodios de violencia, generan trastornos de estrés
post- traumáticos, como altos niveles de activación física y mental, conductas
de evitación y distorsión síntomas de ansiedad, miedo, alergias. Los agresores
son selectivos, no es lo mismo agredir y maltratar a una mujer que está
aterrada, que hacerlo a otro hombre con el que la pelea podría ser equilibrada.
Entienda que hay un mundo lleno de cosas que necesitan su atención, aparte de
ese agresor que no lo(a) merece. La violencia lacera, corroe, destruye pero se
detiene, así que si es víctima de violencia no justifique a su agresor. No viva
en un ambiente violento.
En su espacio
ninguna señal de violencia pasará inadvertida, no tendrá alojamiento. Su
agresor debe entender por sí mismo y preferiblemente sin que usted le sirva de
ensayo, que el maltrato físico y verbal es un recurso de los débiles.
Cualquiera es experto opinando sobre la guerra cuando el que está en la batalla
es otro. El temor no es de Dios produce fracaso, rompa el silencio y que se
entere el miedo que usted está ahí al frente de todo. Los machistas son así
solo cuando les conviene, ¿Porque también no llevan en sus hombros todas las
cargas que se suben las mujeres? ¡Ahí sí no son tan machos! ¿Cuántas más
tendrán que morir, para que los gobiernos hagan algo? Esta situación se puede
abarcar desde muchos aspectos, el educativo, el laboral, el familiar,
psicológico, el legal. No es uno solo de estos puntos que hay que transformar y
vigilar son todos.
Carolina Araujo, Editora-Autora/Abogada/Comunicadora Social
Que palabras tan lindas señor Fernando, sobretodo las 3 últimas líneas, se aterra uno de ver en la calle tanto desamor, tanta incomprensión y desasosiego!... Siempre se pretende que el mundo cambie, sin comprender que el mundo somos nosotros mismos, y que si es cierto que no cambiamos el mundo solo por cambiar nosotros es la única manera de empezar a hacerlo, y es la única forma en la que podemos contribuir... últimamente me he tropezado con muchísimas cientos de personas que necesitan una sonrisa, una palabra de aliento y de esperanza en este mundo que cada día está más vacío y más necesitado de cariño.
Fernando Edmundo del Cármen Laredo Cárter, Escritor
Si, Señorita Carolina, es una situación preocupante la que ud. menciona, preocupante y alarmante. Es una señal de lo mal que está en el mundo la virtud de la Caridad con el otro, y una reducción de la ternura, que se pretende sustituir con mera pasión sexual. Se observa en todo el mundo occidental un aumento de la agresividad en las relaciones de pareja, que aumenta las rupturas y los homicidios. La mescla de miedo a perder la pareja con el instinto de posesión exacervado de los hombres causa miles de víctimas en todos los paises, más el cambio de roles culturales de la mujer en la sociedad, hecho al cual los machos no terminan de adaptarse aún. Agréguele algun complejo de inferioridad encubierto de ese macho en particular, mas un clima de envenenamiento mental progresivo, y tenemos un coctel psíquico muy peligroso. Que la la paz y la ternura, la comprensión y la complementación a la que estamos destinados por el Eterno retornen a miles de parejas infectadas por ese mal, y que los hombres en particular aprendan a decir te amo con todo su ser y no solo por conseguir placer de sus parejas.