Causando enorme sorpresa,como la Madre Teresa,como Gandhi, el buen Mandela,prendiendo la paz y vela.López dejó el improperio,no se fue contra el imperioni atacó a los malos gringos,dio calma a sus odios pingos.Durante el desfile no hablóde pleitos, broncas, cambiósu lenguaje a “pacifista”pro la Rusia socialista.En un dejo de indecencialo traicionó su consciencia,mostro su afecto izquierdososu lado más afrentoso.De la méndiga invasiónno ha dicho ni una oraciónde Ucrania, que harto ha sufrido,pues, jamás se ha condolido.Zelensky, vía un asesor,de su región defensor,puso al peje en su lugaral presto desaprobar.El triste plan de cinco añosde “paz” que acrecienta dañosen su maltrecho país,Andrés es un infeliz.Bien pregona farolónmientras que en nuestra naciónse desata la violencia,la muerte a ciencia y paciencia.México está incendiadoy Amlo ni se ha fijado,predica paz al exteriordesde su cruel interior.Autor: Lic. Gonzalo Ramos ArandaCiudad de México, a 17 de septiembre del 2022Reg. SEP Indautor No. (en trámite)