Colombia, A Salvar la Democracia

Este 19 de Junio, los Colombianos asisten nuevamente a las urnas. Esta vez, para elegir en Segunda Vuelta a quien gobernará su país por los próximos cuatro años. La Primera Vuelta demostró que ninguno de los candidatos alcanzaba la votación suficiente para alzarse con la Jefatura del Estado, también demostró la fragilidad de las nuevas generaciones colombianas. Es que son precisamente los universitarios quienes presentaron mayor simpatía por el socialista Gustavo Petro, un ex-guerrillero del M-19 que contra la memoria histórica hoy pretende gobernar un país agotado por la guerra.

 

. Esta vez, para elegir en Segunda Vuelta a quien gobernará su país por los próximos cuatro años. La Primera Vuelta demostró que ninguno de los candidatos alcanzaba la votación suficiente para alzarse con la Jefatura del Estado, también demostró la fragilidad de las nuevas generaciones colombianas. Es que son precisamente los universitarios quienes presentaron mayor simpatía por el socialista Gustavo Petro, un ex-guerrillero del M-19 que contra la memoria histórica hoy pretende gobernar un país agotado por la guerra.

Colombia más que ningún otro país del hemisferio sabe lo que representa la tesis del Socialismo. Tras medio siglo de luchas intestinas con las guerrillas Comunistas, reconoce lo que es la Democracia a través de la lente de Venezuela, su vecino tiranizado por una dictadura criminal sustentada en el narcotráfico y el delito organizado. En estas Elecciones Presidenciales, la izquierda con una nueva careta (tras la cual se esconde el chavismo) representa por los votos obtenidos en Primera Ronda, una amenaza para la estabilidad democrática del cono sur. Ante este fenómeno (pervertido), la Derecha y la no-Derecha democrática debe plantar cara con firmeza e impedir a toda costa la venezolanización de la política neogranadina.

En democracia se gana y se pierde. Pero sin la democracia no hay juego que valga, y es precisamente la libertad de elegir la que está en juego. Esperaremos y amanecerá un nuevo día, un nuevo mes, un nuevo año en la Colombia que vio nacer también a muchos de mis ancestros y con la cual me identifico, mientras tanto (no esta de más) rogamos al pueblo colombiano que no bote por el despeñadero en votos blancos su posibilidades de salvar a la República.

Pareciera ésta, una repetición de otros eventos electorales por la forma como se plantea desde el plano geográfico la dinámica electoral. Por un lado el eje cafetero y, en fin, todo el centro del país fiel a la derecha conservadora (la misma zona que votó contra los mal llamados acuerdos de "paz" con la guerrilla). Por otro lado, la zona del Pacífico y del Caribe aclamando borregos (con el respeto que los ciudadanos colombianos se merecen) a un Mesías que según afirman "Salvará a Colombia del Uribismo, de la crisis, de cualquier invento". Pero, tras la figura del Progresista ¿qué se esconde? Creo que sobran los comentarios: El socialismo.

No digan después que no se lo advertimos. No, Colombia. El camino no es ese. La única vía de escape que les queda se llama Rodolfo Hernández. Abstenerse, votar en blanco o dejarse enamorar por los cantos de sirena del petrismo, es el suicidio del futuro.

PD: Esta historia ya la vivimos los venezolanos. ¿Los resultados? Están a la vista. ¡Suerte Colombia!

UNETE



Compartir
Tu nombre:

E-mail amigo:
Enviar
PDF

  • linkedin facebook twitter
  • ©reeditor.com
  • Todos los derechos reservados
  • Avisos Legales