La revocación de mandato que se vivió el 10 de abril ha sido un acto histórico para el país, nunca antes se hubiera imaginado alcanzar uno de los mecanismos más fuertes de la democracia, siendo la participación ciudadana la clave para que esto pudiera ser una realidad, sin embargo, el contexto en el cual se desarrolló no cimenta las bases necesarias para mantener este mecanismo vigente en la sociedad.