¡Que dolor tan profundo!, debe ser ahogarse en las destructivas adicciones, entrar en las tinieblas de los perversos vicios, es fácil al inicio los “amigos” se desbordan diariamente regalándote, el peor veneno que cualquiera pueda consumir, “drogas”. El protagonista de esta historia, nos demuestra que por muy difíciles circunstancias que estemos viviendo, nunca debemos decidir ha viajar por ese mundo oscuro, también nos demuestra, que con esfuerzo nuestro y personas de noble corazón podemos salir de la más gigantes pesadumbres que estemos viviendo.