Con mucho agrado se ha recibido la nueva señalética de información vial por parte de los ciudadanos en algunos puntos de Valdivia y que tuvo su origen en Valdivia en la comisión de tránsito y transporte seguro del Centro General de Padres del Instituto Alemán de Valdivia, padres y apoderados con apoyo del directorio de sostenedores del Instituto, rectoría y la Ilustre Municipalidad de Valdivia. Cabe destacar el compromiso de los padres de toda la enseñanza básica que día a día colabora de marzo a diciembre en esta idea del “beso y chao” o kuss und Tschûss, y que con sus chalecos amarillos ayudan a bajar de sus autos los hijos de los otros padres y apoderados que trasladan a sus retoños a clases, eso es un comportamiento desde lo cívico que va mas allá del respeto a una señalética o demarcación en la berma y por sobre la advertencia de un niño estudiante cruzando la calle, es un asunto de sentido común y por el bien de toda la comunidad y de cada uno de sus integrantes, desde el menor, los voluntarios, el padre o madre beneficiario del servicio y de quienes nada tienen que ver en esto y se benefician del ejemplo y las buenas prácticas de la civilidad. Nos recuerda esta ejemplificadora conducta a las brigadas de tránsito formada por alumnos por allá por los años 80 con sus uniformes de colegio, guantes blancos, y terciados o correas blancas cruzadas y un quepí o boina de color azul que ayudaban a controlar el tránsito a Carabineros y auxiliaban a sus compañeros a cruzar la calle.