. Al igual que hubo zonas donde no existió,
porque el golpe de estado de Franco triunfó y ya sólo se supo de la contienda
por la propaganda de los rebeldes, hubo otros en donde el conflicto perduró a lo largo de
varios años, con grupos de guerrilleros, maquis, comunistas que siguiendo las
instrucciones de su Partido, no se resistieron a poner fin a la guerra.
Almudena
Grandes, en su serie “Episodios de una guerra interminable” ya relató como se vivió en el Valle de Arán
ese conflicto eterno entre el ejército franquista y los grupos comunistas, que
desde Francia se dedicaban a hostigar a
los militares de Franco, preparando una invasión que nunca se llegó a producir,
por desidia de la dirección PCE en la URSS.
Ahora, con “El
lector de Julio Verne”, da una vuelta de tuerca a esa situación asfixiante e
inútil que se vivió en algunas áreas montañosas del país, condicionando la vida
y la muerte de sus habitantes. Sitúa el relato en la Sierra Sur de Jaén,
concretamente en la localidad de Fuensanta de Martos, entre los años 1947 y
1949, conocidos como “Trienio del Terror”, donde la vida no era más que un
aplazamiento de la muerte y el miedo era como un sarpullido en la piel de cada
uno de sus habitantes. Una historia de terror y brutalidad implantada por la
Guardia Civil y de angustia para todos
aquellos que dormían en el cuartel de la benemérita, en la que todos pierden y
todos sufren.
Pero es
también, una lucha por la supervivencia frente al vacío de una “vida que no es vida”, a través
de un niño de nueve años, hijo de guardia civil, que se niega a somatizar todo lo que su corta
vida está viendo, y un familia atrapada, contra sus sueños, en el círculo
cerrado de un cuartel de guardias. Una familia que sufre por vivir en el centro
de la represión que se desata en el pueblo, pero que no tiene otra que
aguantar, bajo la amenaza de ésta recaiga sobre ellos.
Personajes que
en ambos bandos están condenados a odiarse y a tener que convivir con ese odio.
El retrato de una España que no debería a producirse nunca más y que Almudena
Grandes nos viene contando para que nunca olvidemos cuáles son los errores de
nuestro pasada como pueblo. Historia convertida en literatura, que es otra
manera de conocer nuestro pasado.