La carta remitida a principios de año a los pensionistas por Fátima Bañez, Ministra de Empleo y Seguridad Social, ha sido la gota de agua que ha hecho rebosar el vaso de la indignación de millones de jubilados. En esta misiva Fátima Báñez, tras destacar la recuperación económica conseguida durante 2017 y la creación de 600.000 empleos, comunicaba el incremento de la pensión en un 0,25%. Esta carta, que ha sido entendida por los pensionistas como una auténtica tomadura de pelo y una provocación, se ha convertido además en el pistoletazo de salida para la movilización que el pasado día 22 de febrero llenó las calles y plazas de toda España, con concentraciones convocadas por la Coordinadora de Pensionistas en Defensa del Sistema Público de Pensiones.