Año: 2016
Año: 2016
. Flanagan es probablemente el escritor australiano más conocido de los últimos años.
La crítica ha descrito esta novela como épica, no solo por centrarse en la Segunda Guerra Mundial y su posguerra, sino por la profundidad del estilo y contenido del libro.La historia narra la vida de Dorrigo Evans, un cirujano australiano que participa en la guerra y que cae prisionero de los japoneses. Junto con otros cientos de prisioneros occidentales, es enviado a Birmania para trabajar en la construcción del ferrocarril que debía servir a los japoneses para suministrar armamento a los rebeldes chinos pro-nipones.La novela se estructura como una secuencia en el tiempo, con la estancia de Evans en el campo de prisioneros como el nudo central. Antes de partir para el frente y cuando está a punto de comprometerse con otra mujer, Evans se enamora de la mujer de su tío. La brusca separación provocada por la llamada a filas marca el tono del libro, una mezcla de añoranza por el amor perdido, así como de culpabilidad. El personaje central del cirujano Evans es particularmente complejo, un hombre que hacia afuera reúne cualidades que le convierten en el líder de los prisioneros y en consecuencia en un héroe de guerra, mientras que en su interior siente un vacío que ni la llegada de la paz consigue mitigar.La narración del sufrimiento en el campo de refugiados está brillantemente conseguida mediante cortos pasajes en los que Flanagan se centra en varios prisioneros y sus diferentes maneras de afrontar el dolor.Pero en mi opinión es la posguerra la fase más interesante de esta novela. Flanagan narra no solamente la vida de Evans y otros exsoldados australianos, sino también la de los que fueron sus guardianes japoneses y coreanos en el campo de prisioneros. Y es la fuerza y viveza con la que el autor expresa los puntos de vista de los perdedores, sus actitudes y reflexiones ante la derrota lo que le da al libro una fuerza especial.Una novela poderosa.