Título: Demasiada felicidad
Título: Demasiada felicidad
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Alice Munro, nacida en Canadá en 1931, no alcanzó a terminar los estudios de periodismo y filología inglesa en la Universidad de Ontario. Casada a edad temprana, decidió volcarse al cuidado de su familia y abandonar la carrera universitaria. Sin embargo, en los escasos momentos de soledad que le brindaba la educación de sus tres hijas, logró encontrar el tiempo y fabricarse un espacio para dedicarse al arte de la narración. Cuenta que sus inicios en la escritura transcurrieron en un escritorio improvisado en el cuarto de la plancha mientras sus hijas dormían la siesta. Soñadora, como todo aspirante a escritor, anhelaba escribir una gran novela pero la limitación de su tiempo la llevó a inclinarse por el género cuentístico. No aventuraba ella entonces que sería considerada la Chéjov canadiense del relato. Ganadora de varios premios como el Premio Literario Governor General’s en Canadá o el Premio Reino de Redonda en España entre otros, fue cosechando, cual trabajo de hormiga, el elogio y la admiración de la crítica. Con su primer libro de relatos Danza de las sombras felices (1968) logró impactar a la crítica obteniendo el Premio Literario Governor General´s. El comienzo de una carrera que se irá consolidando con posteriores publicaciones como El progreso del amor (1986), Secreto a voces (2008), Mi vida querida (2013) y la obra reseñada Demasiada Felicidad (2010) entre otras muchas. En cada párrafo de los diez relatos que componen Demasiada felicidad, Munro logra retratar las emociones e inquietudes de la naturaleza humana. Con aparente sencillez habla del profundo dolor del ser humano, de ese espacio oscuro lleno de sentimientos encontrados que siempre se oculta. Historias de unos personajes en las que, con cierta ironía, la autora pone de manifiesto la falsa certeza, tan afianzada, de estar en posesión del control. Matrimonios felices que se quiebran de repente; brutalidad y odio inevitable de una mujer que de pronto se enfrentan con la inconcebible necesidad de hallar la forma de perdonar al culpable de su sufrimiento; familias disgregadas; demostraciones de afecto que no llegan. Existencias truncadas por cambios inesperados, por un devenir enmarcado por los ineludibles signos de interrogación. Desconcierto, alegría, dolor, miedo, dudas, sentimientos que fluyen en el fuero interno de unos personajes que hacen lo que pueden para sobrevivir en la travesía de la vida. Unas historias narradas con la prosa sencilla y detallista tan característica de la escritora canadiense que demuestran que lo insospechado está a la vuelta de la esquina.