En España, con una cifra oficial de desempleo del 26% y en una economía que proyecta un decrecimiento del 1,3% este año, parece que va a ser difícil seguir implementando sólo políticas de austeridad ya que éstas podrían conllevar una vuelta de nuestra economía a la recesión y agravar todavía más nuestra ya deteriorada situación económica.