. Si no creen, asómense a esta noticia.
¿No era que te gustaba la
globalización? Pues acá tenemos una noticia fresquita que ha corrido por el
cable con un aroma simpático. Quizás era el conflicto que faltaba, pero “nunca
tan rasca”, como diría mi abuela.
A lo mejor ha sido una
manipulación mediática de la CNN que necesitaba tapar con algo nuevo la
escandalera de las corporaciones norteamericanas y la demanda al Vicepresidente
de Estados Unidos por arreglar balances y otras yerbas. Población del mundo,
alerta: estamos a las puertas de la guerra del Perejil, un islote del tamaño de
una cancha de fútbol, próximo a Melilla, cuya soberanía reclaman Marruecos y
España. El islote el Perejil fue invadido el viernes 12 de julio del 2002 por
una patrulla de 15 soldados de Marruecos que pusieron allí la bandera marroquí,
reclamando la soberanía para el reino ceutí.
Fuentes bien informadas
señalaron que en el gobierno, las Ministras Bachelet de Defensa y Alvear de
Relaciones Exteriores, tienen el encargo presidencial de Ricardo Lagos de
atender el conflicto del Perejil como algo estratégico. Como socios de la Unión
Europea que somos, tenemos que preocuparnos y ofrecer recetas, perdón,
soluciones para que impere la paz. Una cosa es estar lejos y otra es ser pasivo
frente a las crisis globales… Total se trata de la Madre Patria y es bueno el
cilantro, pero nunca tanto como el perejil.
Se trata de una crisis
diplomática entre España y Marruecos. La situación entre la frontera de Melilla
y Marruecos es “absolutamente normal”, según informaron el viernes 12 fuentes
de la Guardia Civil de España tras la ocupación por parte de gendarmes
marroquíes de la isla del Perejil, cercana a Ceuta. Esas mismas fuentes
señalaron que los soldados españoles están preparados “para actuar si así lo
requieren instancias superiores”.
El conflicto llegó a la
instancia de la OTAN, pero de allí lo derivaron a la FIFA, la cual, tomando en
cuenta las dimensiones del islote el Perejil, sugirió jugar su destino en un
partido de fútbol, con una regla de oro: el que bota la pelota la va a buscar.
La situación del Perejil recuerda los reinos de Antoine De Saint Exupery, en
donde el Principito recorría pequeños asteroides con inolvidables personajes.
En Chile, el Alcalde de Cachiyuyo se ofreció de mediador y no ha faltado el
avivado que quiere ir de observador con viáticos internacionales. Un conflicto
da para todo.
De vuelta de vacaciones, los
profesores tendrán tema para jorobar a sus alumnos ¿dónde queda el Perejil?
Después de la crisis de la Enron, de la caída de las punto com y de las torres
gemelas del 11 de septiembre, era este el conflicto internacional que nos
faltaba…. ¡bendita globalización¡
Ahora, disculpen, voy a comprar
dólares porque con esto del Perejil, del
euro…ni hablar.
Crónicas de Dos Siglos, 20 de
julio de 2002. Periodismo Independiente
es @hnarbona en Twitter