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Hay que civilizar la agresividad de alguna manera y entre variadas opciones exista una que va mas allá de la servidumbre de esclavo, el perdón o el poner la otra mejilla, es la del castigo, cuyo sinónimo junto con el de justicia es el de venganza.Existe otro que perdona y que viene como mediador, que por medio de su gracias permite la redención, satisfaciendo al mismo tiempo las demandas de la justicia y esto es a través de su parte que exige la parte del otro en determinados pensamientos, palabras y hechos, solo el único cristiano que ha existido en todos los tiempos permite, y hace posible la expiación. Aquel que abusa de la indulgencia termina por colmar a aquel de quien se sostiene y finalmente es expectorado.La venganza se puede aplicar directa o indirectamente, por mano propia o por los instrumentos moderadores cuya misión es vigilar y castigar a quien tienda a la anarquía y la ruptura de los valores.Es necesario el uso de la conciencia para darse cuenta se merece lo que es justo a cada quien y que la aplicación del sometimiento de la voluntad es indispensable y obligatoria.