.
Pero el mundo sigue en su burbuja de cristal donde apenas y se encuentran sus propios defectos es tanto el miedo de reconocer lo que hemos hecho y estamos haciendo que nos hacer ser lo que actualmente somos que preferimos mirar a los otros y no ver la agresividad que llevamos dentro, así de esta manera nos olvidamos de nosotros y todos pagan: tanto ellos como nosotros ya que es un hecho que herir es la manera mas cotidiana de comunicarnos.