Os comparto una pregunta que he recibido por correo y mi posterior contestación. Me gustaría saber que os parece.
Pregunta:
Gracias, Fernando.
Quería contactar contigo porque eres desarrollador de apps. Yo tengo una idea que no sé si existe ya o no, pero no se la he contado a nadie porque tengo entendido que las ideas no se pueden patentar, y no quiero que (por decirlo mal y pronto) me la roben. A lo mejor es una tontería o a lo mejor tiene éxito.
Tú que tienes experiencia en estas cosas, ¿qué pasos crees que debería seguir? ¿Debo contársela a un desarrollador (por ejemplo, tú) y confiar? ¿Debo registrarla de algún modo?
Gracias
Respuesta:
Vamos a ver,
espero que no te suene extraño y rompedor, pero primero me presento. Me considero una persona honesta, bastante arriesgada y muy sencillo, a veces demasiado ambicioso o impulsivo, como defecto quizás mi irascibilidad en ocasiones me juegue malas pasadas. Es menester hacer esta presentación, pues creo que un punto de vista puede ser compartido y bien entendido dependiendo de la persona que te lo cuente, aunque al final lo que perdura es la idea, la verdadera alma de cualquier proyecto es la persona.
Esta idea la aprendí de Alejandro Suarez y su libro Ha llegado la hora de montar tu empresa. En el enlace anterior podrás ver las impresiones con las que me quedé.
La duda que me planteas se me hace eterna. Es un dilema que incluso yo que cuento con prácticamente todas las herramientas para hacerla realidad, con gente de confianza con la que puedo trabajar, al final, no lo tengo claro. Siempre queda un poso de desconfianza en todas las acciones humanas y creo que simplemente son las decantaciones que por acción de la prudencia, a todos nos queda.
Y aquí es donde todo radica, en la confianza en una/o misma/o, en tener clarísimo que los productos originales siempre son superiores a las simples copias. En tener los arrestos necesarios para liderar proyectos y asociaciones win-to-win y en saber contener el instinto tan español y que tanto lastra futuros éxitos como puede ser pedir rentabilidad a corto plazo sin dejar madurar la materia prima. Si no que se lo digan a los fruteros que le venden al Grandes Superficies.
Otro punto clave son estas asociaciones win-to-win, si la idea copa el mercado y no deja trozo del pastel a otros para que puedan explotarla creo que sería una idea condenada al fracaso. Véase el ejemplo de Android con Google. Aquí tenemos a una buena plataforma que abre su código y comparte prácticamente todos sus secretos para que desarrolladores Freelance y empresas puedan ganar también con sus productos. Con Apple ídem de lo mismo pero en este caso la apertura no es total pero si su compromiso con la calidad y esto compensa.
En cuanto a que la idea existe, pues decirte que desde que se inventó la rueda han salido multitud de modelos y aplicaciones. Esto es lo que menos nos a de preocupar, el centro de todo es el usuario final, que le satisfaga sus necesidades o caprichos, sus deseos o complete sus cualidades, aquí radica la calidad muchas veces.
En cuanto a patentes, pues está bien que queramos proteger nuestro negocio, creo que además es necesario pero sin duda no es suficiente como para decir que nuestra empresa es exitosa o decir que seguramente perdure. Lo que realmente no se puede patentar son las personas, aquí radica el éxito, en nuestro capital humano. Insisto, es necesario patentar pero en primer termino crear algo que sea difícilmente copiable, hecha la ley hecha la trampa dicen.
En cuanto lo de compartirlo o no con desarrolladores pues está claro, yo comparto mis ideas con todas las personas que me puedan ayudar, con ese cuñado impertinente (frase de Alejandro Suarez) que está deseando de molestarte, con tus colaboradores habituales y con tus futuros socios. Compartirlo con la familia puede ser buena idea pero ellos no van a ser sinceros nunca, te quieren demasiado.
Prácticamente todos los consejos están extraídos del citado libro, me reservo la intensidad y los adjetivos del discurso.
Espero haber resuelto la duda pero a mi me has dejado algunas ¿Por qué no compartir esto en público?¿Puedo publicar esta pregunta y respuesta omitiendo datos personales en mis redes sociales?
No creo que compartir de forma abierta al publico sea muy sensato sin antes haberlas registrado aunque sea en una web y con un nombre que que tampoco este registrado por otro/s.
Una vez hecho esto, preséntala en sociedad aunque no este terminada al 100%. Para que terminar algo a lo loco cuando pueden aparecer posibles clientes y partners poco a poco. Si de verdad estan interesados esperar no les costara mucho.
Totalmente de acuerdo contigo, el alma del producto es el que le da vida a este.
Suerte y al toro maestros.
Que alguien os coja confesaos, ¡aquí Dios no existe!
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Hola Fernando,
Compartir tu idea al público o en las redes sociales, tiene sus ventajas, por ejemplo, como una fuente de financiación colectiva (crowdfunding). Pero sólo si la idea esta patentada o tengo el capital humano necesario para realizarla. También, cómo respondiste, un producto será más efectivo que otro si puede ser explotado (o utilizado) por otras empresas. Ejemplo: Ouya, el concepto low-cost de consola con Android, que puede ser aprovechada de otras múltiples formas (entretenimiento musical, televisión, etc.) y sus posibilidades son muy amplias, pudiendo abarcar varias necesidades, en torno al ocio, del consumidor.