Dado
que la evolución de los seres humanos es evidente que los mismos nacen
con unos saberes naturales, que a medida de su crecimiento entre la enseñanza y
aprendizajes van creando su propio conocimiento, pero estos en la
postmodernidad se perciben incompletos, ya que al alcanzar los grados de la
educación superior, se les presenta las dificultades de razonamiento y por
consecuencias la construcción del conocimiento en las diversas ramas y
disciplinas universitarias, realidad preocupante entre la comunidad social
docente – estudiantes en la culminación de los contenidos programáticos
establecidos por las instituciones universitarias y la mecanicidad de su
aplicación mas no su interpretación y ubicación en el tiempo y espacio del
humanismo que se requiere en la construcción del conocimiento de los
estudiantes en la educación superior.
Tomando en cuenta que el constructivismo es una teoría que propone
que el ambiente de aprendizaje debe sostener múltiples perspectivas o
interpretaciones de realidad, construcción de conocimiento, actividades basadas
en experiencias ricas en contexto (Jonassen, 1991). Así mismo, esta teoría se
centra en la construcción del conocimiento, no en su reproducción, y un
componente importante del constructivismo es que la educación se enfoca en
tareas auténticas ya que, tienen una
relevancia y utilidad en el mundo real.
En cambio, el individuo siente la necesidad de construir su propio
conocimiento a través de la experiencia esta experiencia conduce a la creación
de esquemas y los estos son modelos mentales que almacenamos en nuestras
mentes, y van cambiando, agrandándose y volviéndose más sofisticados a través
de dos procesos complementarios: la asimilación y el alojamiento (J. Piaget,
1955).
Fundamentos
del Constructivismo.
Dichos
fundamentos nos permite conocer sus primeras referencias emanadas por ese gran
filosofo Descartes (1596 – 1650), como precursor de las corrientes
constructivistas modernas, donde señala la analogía constructivista entre la
técnica mecánica con el arte de despiece de una maquina y la memorización matemática
para su amado, así como, la aplicación de la geometría ontica y ontológica como
artificios para la representación y construcción de figuras geométricas,
fundamentando el constructivismo en los siguientes Principios:
Interacción
del hombre con la naturaleza.
Experiencia
previa como condicionante, del conocimiento a construir.
Elaboración
del sentido en el mundo de la experiencia.
Organización
activa
Adaptación
funcional entre el conocimiento y la realidad epistémica.
Principios
Psicológicos y Educativos del Constructivismo.
Con estos principios emergentes
generan sus formas de carácter Psicológico y Educativos, enmarcados en el
siguiente orden:
Constructivismo Psicológico: se basa en una serie de hipótesis
descritas por Pepper (1942), derivadas del conocimiento y entendimiento del
sentido común, como: Formismo, Mecanicismo, Contextualismo y Organicismo,
tomando en cuenta las siguientes consideraciones:
El
Formismo:es la
hipótesis basada en la metáfora raíz de similitud y ampara principalmente
los procesos de clasificación e identificación, de manera que la actividad
cognitiva fundamental es el establecimiento de distinciones.
El
Mecanicismo: por su parte,
se basa en la metáfora de la máquina y en una visión del mundo como
compuestos de entidades discretas con conexiones antecedente- consecuente
entre ellas.
El
Contextualismo: difiere de
las dos anteriores, se asienta en la metáfora raíz del acontecimiento
histórico, el conocimiento activo en su contexto actual.
El
organicismo: se basa en la
metáfora raíz de los procesos orgánicos inherentes a todos los sistemas
vivos y en evolución. Se concibe como un proceso dialéctico en el que se confrontan
los fenómenos mediante oposiciones y contradicciones que dan lugar a
cambios cualitativos en vías de una mayor complejidad e integración.
Estos principios para algunos filósofos
como, Niemeyer y Mahoney distinguen cuatro formas de psicología
constructivista: material, eficiente, formal y final.
Constructivismo Material:Se relaciona con la hipótesis formistay plantea la
causalidad material o creencia de que las propiedades intrínsecas y
estables de los fenómenos dan cuenta de su funcionamiento, ya que presenta
una inspiración de carácter más filosófico y postula que la realidad es
una función de la estructura del sistema cognitivo humano conocida como el
constructivismo radical, que según Von Glaserfeld (1984) citado por
Niemeyer y Mahoney, dice que “el constructivismo es radical porque rompe
con la convención y desarrolla una teoría del conocimiento en la que éste
no refleja una realidad ontológica objetiva, sino sólo un ordenamiento y
organización del mundo construido por la experiencia del propio sujeto”.
(p. 93).
Constructivismo Eficiente. Esta postura ve al conocimiento
como una un proceso activo en el cual se interpretan y almacenan las entradas
ambientales como información significativa. Entre las teorías que se
adhieren a este enfoque están las teorías constructivistas del procesamiento de la información y
la teoría del aprendizaje social (Bandura,
1986).
Constructivismo Formal.Se asocia con la metáfora de la
hipótesis contextualista del mundo. Las teorías que se incluyen en este
enfoque suponen que la realidad es activa, cambiante y está constituida
tanto a nivel personal como social El significado emerge del patrón
organizacional o formal de los fenómenos dentro del contexto y a través del
tiempo. La actividad humana, así, se desarrolla en un contexto
histórico-social y cultural de relaciones y significados. Entre las
teorías que se adaptan a este esquema, tenemos proposiciones como el construccionismo social y la psicología narrativa. En la
primera de ellas, se plantea la idea de que el conocimiento no reside
exclusivamente en la mente del sujeto o en el medio, sino en los procesos
sociales de interacción e intercambio simbólico. Por su parte, la
psicología narrativa es una opción que utiliza la narrativa como un
contexto organizador de la acción humana. Entre los representantes más
conocidos de esta perspectiva está Jerome Bruner.
Constructivismo Final:Se asocia con la hipótesis
organísmica del mundo y con la metáfora del proceso orgánico. Mantiene una
posición epistémico que concibe el conocimiento como una síntesis
construida de las contradicciones que surgen de las interacciones
persona-ambiente. Entre las expresiones de este enfoque están las teorías evolutiva y dialéctica y la teoría de sistemas. En el caso
de la teoría evolutiva y dialéctica, destaca Piaget (1974) como máximo
representante.
Constructivismo Educativo.
De igual manera, Flórez
(1994) identifica algunas posturas dentro del constructivismo aplicado a la
educación, en la cual, se pueden observar cuatro corrientes: Evolucionismo
intelectual, Desarrollo intelectual, Desarrollo de habilidades cognoscitivas y Construccionismo
social.
Evolucionista o desarrollista: establece como meta de la
educación el progresivo acceso del individuo a etapas superiores de su
desarrollo intelectual. Se concibe al sujeto como un ser motivado
intrínsecamente al aprendizaje, un ser activo que interactúa con el
ambiente y de esta manera desarrolla sus capacidades para comprender el
mundo en que vive. Esta postura está directamente relacionada con los
planteamientos de Piaget.
Desarrollo intelectual con
énfasis en los contenidos científicos: postura que sostiene el
conocimiento científico como un excelente medio para el desarrollo de las
potencialidades intelectuales si los contenidos complejos se hacen
accesibles a las diferentes capacidades intelectuales y a los
conocimientos previos de los estudiantes. Se advierten dos modalidades dentro
de esta postura: aprendizaje por descubrimiento y aprendizaje significativo.
Entre los representantes de ellas se menciona a Ausubel y Bruner.
Desarrollo de habilidades
cognoscitivas:esta
corrientese
refiere a lo más relevante del proceso de aprendizaje es el desarrollo de
tales habilidades y no los contenidos. La enseñanza debe centrarse en el
desarrollo de capacidades para observar, clasificar, analizar, deducir y
evaluar, prescindiendo de los contenidos, de modo que una vez alcanzadas
estas capacidades pueden ser aplicadas a cualquier tópico. Constructivista social: propone el desarrollo máximo y multifacético de las
capacidades e intereses del aprendiz. El propósito se cumple cuando se
considera al aprendizaje en el contexto de una sociedad, impulsado por un
colectivo y unido al trabajo productivo, incentivando procesos de
desarrollo del espíritu colectivo, el conocimiento científico-técnico y el
fundamento de la práctica en la formación de las nuevas generaciones.
Representantes de este esquema son Jerome Bruner y Vygotski.
¿Cómo se construye el conocimiento?
Para la construcción del conocimiento se
debe tomar en consideración conocer los siguientes aspectos:
El constructivismo, el
sujeto tiene que construir tanto sus conocimientos y sus ideas sobre el
mundo, como sus propios instrumentos de conocer, a lo largo de su
desarrollo va pasando por una serie de etapas que, en definitiva, son
distintas formas de interaccionar con la realidad, con una posición que se
sitúa entre el innatismo y el empirismo pero que constituye una concepción
original que supone una explicación diferente de cómo se construye el
conocimiento.
La educación:hoy el
universo científico se declara constructivista, y se publican abundantes obras
sobre el constructivismo y la educación. Sin embargo, esto ha tenido como
consecuencia que se llama constructivismo a la mala interpretación y
comparación con el empirismo (el conocimiento viene de fuera) que con otra
cosa. El constructivismo nos ayuda a entender que es lo que sucede en el
interior del sujeto cuando trata de formar nuevos conocimientos.
Por ello puede ser una teoría útil para explicar los efectos que tienen
las prácticas educativas, pero no puede prescribir de ninguna manera lo que
debe hacerse, que depende de decisiones sociales. Nos puede ayudar a entender
por qué los sujetos no entienden algunas cosas o las entienden de manera
diferente a como intentamos enseñárselas. Si la teoría constructivista lo que
nos enseña es que los sujetos forman sus conocimientos a partir de los
conocimientos que ya tienen, poniéndolos a prueba y contrastándolos con la
realidad, que es tanto la realidad física como la realidad social, lo que el docente
pueda hacer para promover el progreso en el conocimiento es facilitar que sus estudiantes
hagan anticipaciones a partir de sus representaciones y las pongan a prueba con
lo que sucede o con las concepciones de otros.
Características
del aprendizaje constructivista
El ambiente de aprendizaje constructivista
se puede diferenciar por ocho características:
El
ambiente constructivista en el aprendizaje provee a las personas del
contacto con múltiples representaciones de la realidad.
Las
múltiples representaciones de la realidad evaden las simplificaciones y
representan la complejidad del mundo real.
El
aprendizaje constructivista se enfatiza al construir conocimiento dentro
de la reproducción del mismo.
El
aprendizaje constructivista resalta tareas auténticas de una manera
significativa en el contexto en lugar de instrucciones abstractas fuera
del contexto.
El
aprendizaje constructivista proporciona entornos de aprendizaje como
entornos de la vida diaria o casos basados en el aprendizaje en lugar de
una secuencia predeterminada de instrucciones.
Los
entornos de aprendizaje constructivista fomentan la reflexión en la
experiencia.
Los
entornos de aprendizaje constructivista permiten el contexto y el
contenido dependiente de la construcción del conocimiento.
Los
entornos de aprendizaje constructivista apoyan la «construcción
colaborativa del aprendizaje, a través de la negociación social, no de la
competición entre los estudiantes para obtener apreciación y conocimiento»
(Jonassen, 1994).
Principales elementos constitutivos del
Constructivismo.
El constructivismo tiene una perspectiva
epistemológica subjetivista de la realidad, es decir el investigador e
investigué se funden en una entidad “monástica” simple, así los resultados son
literalmente la creación del proceso de interacción entre los dos: investigador
e investigué (Guba, 1990). Desde un punto de vista metodológico, las
construcciones individuales se escogen y refinan de manera hermenéutica, y
luego comparadas y contrastadas de manera dialéctica, de Allí surge un consenso
sustancial ya que para, Von Glasersfeld (1988), el constructivismo es radical
porque rompe con lo convencional/ordinario y desarrolla una teoría del
conocimiento en el cual el conocimiento no refleja una realidad ontológica
“objetiva” sino el ordenamiento y la organización de un mundo constituido por
nuestra experiencia. Moigne, (1994) en Jonnaert y Masciotra (2004) destacan que
desde una opinión epistemológica, el constructivismo constituye un paradigma
que puede servir de fundamento a distintas teorías del desarrollo de
conocimiento.
Implicaciones
generales del constructivismo cognitivo.
Según la teoría constructivista de Piaget,
existen dos principios en el proceso de enseñanza y aprendizaje: el aprendizaje
como un proceso activo, y el aprendizaje completo, auténtico y real (J. Piaget,
1978).
·
El aprendizaje como un proceso activo: En el proceso de
alojamiento y asimilación de la información, resultan vitales, la experiencia
directa, las equivocaciones y la búsqueda de soluciones. La manera en la que
se presenta la información es de suma importancia. Cuando la información es
introducida como una forma de respuesta para solucionar un problema, funciona
como una herramienta, no como un hecho arbitrario y solitario.
·
El aprendizaje: completo, auténtico y real: El significado es
construido en la manera en que el individuo interactúa de forma significativa
con el mundo que le rodea. Esto significa que se debe enfatizar en menor grado
los ejercicios de habilidades solitarias, que intentan enseñar una lección.
Los estudiantes que se encuentren en aulas diseñadas con este método llegan
aprender estas lecciones, pero les resulta más fácil el aprendizaje si al mismo
tiempo se encuentran comprometidos con actividades significativas que
ejemplifiquen lo que se desea aprender.
Algunas
consideraciones de Autores sobre el Constructivismo.
Desde Aristóteles a Descartes y hasta un
pasado muy reciente, las construcciones científicas y sociales de la realidad
han estado basadas enteramente en las concepciones de un espacio tridimensional
y de un tiempo definido por una progresión continua y lineal.
Según
Zuñiga, (1993). El constructivismo, se interesa en cómo se crean las
significaciones y cómo se construye la realidad. Su punto de articulación se
sitúa en una epistemología descriptiva, evolutiva o genética, la cual se centra
en las siguientes cuestiones: ¿Cómo se conoce? ¿Y cómo se comunica lo que se
conoce?.
(Von
Glasersfeld, 1988: 32). El constructivismo indica que las realidades son
múltiples y que ellas existen en el espíritu de la gente. Así, la realidad se
presenta a partir de múltiples construcciones, de las cuales la base es social,
vivenciada, local y específica, dependiente de su forma y su contenido de las
personas que las construyen.
La perspectiva de Kant, que si todo conocimiento debuta con la
experiencia, ello no prueba que todo el conocimiento deriva de la experiencia.
Así, Kant viene a dar respuesta a las interrogantes dejadas abiertas por Hume,
al formular que la razón no extrae sus leyes de la naturaleza sino que las
prescribe.
Para Guba (1990), el constructivismo se basa en razonamientos
hermenéuticos y dialógicos; proceso que son, en nuestra opinión, las
construcciones de la realidad.
Watzlawick (1988) indica que la construcción de la realidad
probablemente la más aceptada universalmente se basa en la suposición que el
mundo no puede ser caótico; no por el hecho que tengamos de argumentos menores
o insuficientes, sino por la idea de un mundo caótico sería simplemente
insoportable.
El constructivismo se puede resumir a partir de Von Glasersferls (1991),
Larochelle y Désautels (1992) en cuatro ideas principales:
Su fundamento es el escepticismo, el cual
destaca la imposibilidad de validar el conocimiento adquirido por la
experiencia como aquel resultante de otro tipo conocimiento.
Las coyunturas históricas añaden la teoría
instrumentalista como medio de salvar la religión y, después de ella, la política,
limitando lo científico al método, dejando las explicaciones globales y la
elección de la acción social (proyectos de sociedad, orientaciones,
prioridades) a los teólogos y a los políticos.
Es la conciencia en el tipo de construcción de
conceptos, [un tipo de] carácter “realizado” de hechos científicos, que
permite en knorr - Cetina de referirse a la ciencia como a una
“manufactura de conocimientos”.
La evolución en un sentido original, como un
proceso de extinción selectiva de variaciones poco viables, y no como una
orientación divina hacia un objetivo preestablecido.
En síntesis, los constructivistas
sociales insisten en que la creación del conocimiento es más bien una
experiencia compartida que individual, lo que posibilita el que surjan nuevos caracteres y
rasgos, que implica una relación recíproca y compleja entre el individuo y el
contexto. Por esto considero que los autores antes mencionados concuerdan que la
situación instruccional debe verse guiada por ciclos que inician en actividades
de descubrimiento por los estudiantes, donde estos interactúan libremente con
los objetos según sus concepciones espontáneas para pasar de manera sucesiva a
fases de formalización o de confrontación con un saber más institucionalizado.
Finalmente, con el
presente ensayo se pretende brindar al
mundo científico un abanico de ideas y formas de cómo abordar el
constructivismo en las disciplinas de las ciencias sociales y sus dimensiones
emergentes desde mi punto de vista epistemológico,
ontológico, axiológico y metodológico en cada uno de los escenarios del
universo científico. Así mismo, mi
intención ha sido situar la teoría constructivista como referente teórico en la
educación superior actual en su contexto
histórico, filosófico y explorar sus perspectivas en el orden antropológico y
epistemológico, así como las diversas expresiones de la teoría en los planos
psicológico y educativo que nos devele el conocimiento