“Para el reto más gigantesco, la versión más chiquita del
presidente. Ante una amenaza como nunca, un presidente como siempre. Para una circunstancia
extraordinaria, un presidente ordinario.”
—Carlos Loret de Mola—
Han pasado 210 años desde la fundación del estado moderno
que es México y a través del tiempo, se han vivido crisis económicas que han
marcado la historia del país. Actualmente, como resultado de una suma de
acontecimientos, se aproxima la que se pronostica será la mayor crisis
económica de México.
EL PETROLEO Y COMBUSTIBLES
El petróleo es una parte fundamental en la economía mexicana,
de él dependen 20% los ingresos del país. Al realizar el paquete económico 2020
para gastos e ingresos, se calculó que el precio de la mezcla mexicana estaría
en promedio en 49 dólares por barril, con esto se calcula el número de barriles
que se producirán en el año y por consiguiente, los ingresos esperados. De aquí
se determina cuánto dinero se podrá gastar.
A causa de la reforma energética de Enrique Peña Nieto en
2014, los precios de la gasolina no dependen del gobierno sino, del mercado por
lo cual, estos han estado bajando en todo el mundo.
¿El problema?
Resultado de la guerra petrolera entre Rusia y Arabia
Saudita el precio del crudo a nivel mundial se desplomó. Esto provocó que, los
precios de la mezcla mexicana pasaran de 56 dólares a inicios de año a, 10.61
dólares el 1 de abril, esto es 78% menos del precio estimado. Además, PEMEX ha
estado disminuyendo la producción de crudo desde el año anterior. Menos
producción a menos precio significa menos ingresos para el gobierno.
Encima, la crisis sanitaria esta provocando que los individuos
se tengan que resguardar en casa, reduciendo el consumo de combustibles por el
uso de automóviles, aviones, camiones, maquinaria, etc. Lo que crea una
disminución en la oferta, lo que disminuye la demanda, lo que disminuye el
precio aún más.
Sumémosle además que, durante el 2019 las pérdidas de la
petrolera aumentaron 92% respecto a las pérdidas del año anterior. Quiere decir
esto que PEMEX esta muy cerca de ser clasificado como bono basura (pasar de
BBB- a BB+) ya que ha registrado dos años seguidos de perdidas y este año no
tendrá capital suficiente para cubrir sus deudas. Esto implica que todos
aquellos inversionistas, fondos de pensiones, bancos y demás que, de acuerdo a
reglamentos internos, no puedan invertir en bonos sin grado de inversión,
retirarán su dinero ya que no tendrán certeza de que sus inversiones tendrán un
retorno.
LA IP (iniciativa privada) Y EL EMPLEO
Existe un error común de interpretación cuando se escucha al
gobierno decir “creación de empleos”, entendiendo que es él quien los crea. La
verdad es que no, de la Población Económicamente Activa (PEA) de México, que es
más de 57 millones de personas, únicamente el 4% es un empleo directo del
gobierno, el 96% restante es creación de la iniciativa privada, ya sea formal o
informalmente.
Ante una crisis como la que se nos avecina, la labor del
gobierno debe ser, mantener esos empleos activos, tratar de aminorar lo más
posible la perdida de estos, crear mecanismos que ayuden a los creadores de
empleos para que puedan mantenerlos y no tengan que presidir de trabajadores,
ya que, en ultima instancia, son ellos quienes con sus impuestos, ingresos y
gastos mantienen la economía a flote.
¿El problema?
En su anhelo de ayudar a los menos favorecidos, mantener su
popularidad con aquellos que lo eligieron, seguir deshonrando la labor de los
empresarios, seguir siendo él quien da y quien quita, continuar recriminando a
los “neoliberales y conservadores” todo lo malo que pasa en el país, se rehúsa
a gobernar para todo México porque, en el momento en que dejes de apoyar a los
empresarios, tendrás una crisis de empleos.
Y no es que ver por los mas pobres este mal, es lo mejor que
se puede hacer. Pero desgraciadamente no son ellos los productivos. Si las
medidas que se toman perjudican a los que sí producen, habrá menos trabajos,
menos pagos de impuestos y por lo tanto menos recursos para los programas
sociales. Únicamente ver por los pobres, tarde o temprano acabará perjudicando a
toda la población.
Los grandes empresarios son los que menos van a sufrir,
ellos fácilmente pueden cubrir salarios de sus empleados. La cuestión es que, las
Micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) generan la mayoría de los
trabajos en México. Obligarlos a no despedir trabajadores y pagarles salarios
por lo menos un mes teniendo cero ventas, a seguir pagando los impuestos,
rentas, aportaciones al seguro social y demás, terminará por quebrarlos; y si
quiebran, al final despedirán a sus trabajadores.
“Hay otros que en efecto no se están portando bien, pero
todavía es tiempo de rectificar, porque van a quedar muy mal, después de qué
sirve tener una campaña de publicidad, de cientos, miles de millones de pesos tiene
una emergencia actuaron de manera egoísta, o usurera”
—Andrés Manuel—
MÉXICO ANTE EL MUNDO, INVERSIÓN SIN RETORNO.
“Es fundamental que el mensaje y las acciones del gobierno
tengan un componente que garantice la certidumbre tanto jurídica como financiera
para los siguientes años. El objeto social de la inversión calificada debe ser
derrotar las fuerzas oscuras del tiempo y la ignorancia que envuelven nuestro
futuro.”
—John Maynard Keynes—
En palabras del subsecretario de hacienda, “si México quiere
crecer a tasas superiores a las que en promedio ha crecido las últimas décadas
y superar además la tendencia de aún más bajo crecimiento que se prevé para los
siguientes dos años, se requiere de forma indispensable la inversión y
participación del sector privado”. Por ello es imprescindible, como gobierno,
cuidar la imagen que tienes ante el mundo.
JP Morgan estima una caída en la economía mexicana de 35.5% para
el segundo trimestre de este año. Standard & Poor´s redujo de BBB+ a BBB
(con opción de bajar a BBB-) la calificación crediticia de México; de volver a
bajar, el siguiente paso es BB+, que es lo mismo que bono basura.
En este punto, nuestro presidente peca de exceso de fe en
que todo se va a solucionar esperando únicamente. Y es que, esta rechazando por
excesos todo lo que tenga “inversión privada” en ello. Rechazando sin entender
lo valiosa que es la inversión privada.
Es muy importante en el desarrollo económico del país, es la
forma de mover el efectivo, de que crezca el empleo, los beneficios sociales,
la transferencia de tecnología y conocimiento. Por ello se debe de cuidar. Y
desgraciadamente el gobierno ha estado tomando malas decisiones en este rubro.
El primer paso en falso del gobierno en este tema fue
cancelar el NAIM, hito del sexenio de Peña Nieto. A partir de ahí los
inversionistas comenzaron a ver con cuidado las decisiones del presidente. Últimamente,
se decidió cancelar el proyecto de inversión de la compañía Constellation Brand,
una planta cervecera que llevaba 4 años en construcción, que planeaba hacer una
inversión de casi el 2% del PIB. A pesar de que se llegó a un acuerdo con el
gobierno para que no sacaran la inversión del país, muchos ya se han dado
cuenta lo fácil que es que el presidente te cancele.
Ha decidido continuar la construcción de Santa Lucia, El
tren Transístmico, la refinería de Dos Bocas, el tren maya y la termoeléctrica
de Morelos a pesar de que ya se han desperdiciado miles de millones de pesos en
ellos y cientos de organizaciones y las suyas propias han pronunciado su
inviabilidad, además, los proyectos de infraestructura valen miles de millones
y se pagan en dólares.
La tasa de referencia del Banco de México ha bajado de 8.25%
a 6.50%, esto desincentiva a los empresarios a invertir en el país, ya que
pueden encontrar a mucho menos riesgo mejores opciones en otros países.
El fondo de estabilización de los ingresos presupuestarios
es de 290 mil millones de pesos y ya han usado 150 mil millones (más de la
mitad) resolviendo un problema causado por el gobierno mismo.
CONCLUSIÓN
La crisis por venir no es resultado de una mala decisión,
sino de, la suma de muchas malas decisiones tomadas y por tomar. El Covid-19
solo fue la gota que derramó el vaso.
Por un lado, menos ingresos del sector petrolero. Por otro, exceso
de gastos por los cinco elefantes blancos del gobierno. Por otro, el dólar en
su máximo histórico, 25.77 pesos, incrementando aún más los gastos. Por otro, negación
a condonar impuestos a empresarios. Por otro, México a un paso de ser bono
basura. Por otro, la economía detenida por la cuarentena, sin contar que no
hemos llegado al clímax de la situación. Por otro, la inversión privada cayo
4%.
Como el criticar sin aportar no tiene sentido, mis
propuestas son, cancelar Dos Bocas y enfocarse en restaurar las refinerías
existentes. Olvidar los demás megaproyectos y reenfocar el dinero en programas
para apoyar a Mipymes. Condonar impuestos a empresarios para que puedan seguir
pagando a sus empleados, a pesar de no estar percibiendo ingresos. Recontratar
deuda y comenzar a gastar el dinero invirtiendo en infraestructura, salud,
educación, etc. Crear una reforma fiscal. Incentivar la inversión privada con
menos tasas de interés. Aumentar el gasto en salud y seguridad, dar mas y
mejores salarios en estos rubros, son ellos los que dan la cara en crisis como
estas.
Y sobre todo, tomarse con seriedad la crisis que se viene. Y
no pensar que, el “bajar salarios a altos funcionarios” y perseguir
judicialmente a quienes no paguen impuestos son medidas para afrontar esto
diciendo que, el país no tiene dinero suficiente, somos la décimo tercera
economía del mundo, el país no es pobre. Pobres son los que lo gobiernan.
Dudo mucho que todos hayan llegado a este punto. Si lo
hiciste, te lo agradezco mucho.
Y me gustaría saber tu opinión sobre lo que escribí.