. Geólogo de formación. Ejerció como diseñador gráfico y publicista hasta que los talleres de escritura creativa llevaron a Pedro Ramos en línea recta a la literatura; en forma de novelas pero también de poesía y teatro.
Ahora y desde hace años, dirige –por toda España–aquellos talleres de escritura de los que tanto aprendió, además de coordinar eventos literarios entre otros terrenos donde mezcla diferentes disciplinas.
Entrevista realizada por Begoña Curiel para ELD.–Leo estupendas críticas de “Tres mil noches con Marga”. ¿Es de los que rastrea la red buscando opiniones y comentarios sobre lo suyo?No rastreo la red, pero si me etiquetan, sí que me gusta leer lo que otros tienen que decir. Para mí contar historias es un ejercicio de comunicación. Yo soy el emisor, el libro es el mensaje y el lector es el receptor. Su mensaje en las redes sociales, o un correo a través de mi página web, es la confirmación de que han recibido mi mensaje. Otra cosa es que les haya gustado. Con Marga por ahora estoy teniendo mucha suerte. No para de darme alegrías.–Machismo, drogas, terrorismo. Su novela entra en estos asuntos. ¿Es un recorrido por periodos de tiempo concretos, responde a un interés particular o las temáticas venían bien para contar su historia?Yo quería contar la historia de Marga. Eso era lo principal. El machismo marca la relación de Marga y su padre. La heroína, siempre quise hablar de esa generación arrasada por la droga (soy de Entrevías). Y en Galicia también tuvo mucha importancia, como en el resto de España. El terrorismo lo incluí porque me interesaba mucho, precisamente, el momento del nacimiento del espíritu de Ermua. Como toda una sociedad puede llegar a movilizarse. La novela va un poco de eso.–Creo que lo de las presentaciones no le gusta mucho, o al menos el término para definir ese acto público donde el autor da a conocer su obra. ¿Es así?Creo que “presentar un libro” es algo del pasado. El formato escritor+editor+amigodelautor separados por una mesa del grupo de personas que hayan conseguido convocar. El colmo es cuando amigodelautor saca un papel y lee la presentación del autor en cuestión. Media hora después dice “Bueno, pero ustedes han venido a escuchar a Fulanito”. Prefiero participar en “encuentros”, “charlas”, “conversaciones” y que sea el público, los lectores, quienes hagan las preguntas. El talón de Aquiles de esta propuesta es cuando no hay público.–De hecho sus presentaciones no suelen ser las clásicas en las que muchos nos hemos aburrido alguna vez. Aunque el protagonista fuera relevante. ¿Le ha pasado a usted?Muchas veces. Afortunadamente, hoy por hoy se organizan multitud de actos alrededor del libro y no tienen ese punto de caspa. De lo contrario, estaríamos muertos (de aburrimiento)–He disfrutado y mucho de su página web. Interesante y original. Por ejemplo me gusta la diferenciación de su perfil según el destinatario: “Para los que van al grano”, “Para curiosos” y “Para organismos oficiales”. Me parece divertido pero siento curiosidad. ¿Existe un por qué detrás de esta clasificación?Claro, porque no todos buscamos lo mismo.–Me encanta que en su blog regale una corrección a sus seguidores. En estos tiempos donde nadie regala nada por nada me gustaría saber por qué. Aunque asegura que es “por aguantarle”. Tengo un boletín con 2000 suscriptores. Reciben noticias mías, más o menos, una vez a la semana. Este mes, con el lanzamiento de Tres mil noches con Marga los he tenido un poco descuidados y quería pedirles perdón de esta manera. Aguantar a un escritor es un rollo. Sobre todo cuando se pone en modo “he venido a hablar de mi libro”.–Dice que creció en talleres de escritura. De hecho ha trabajado en muchos desde 2004. ¿Qué ha visto en todo ese tiempo, más ganas que talento o al revés?Si no fuera por los talleres de escritura, yo no estaría aquí. Primero como participante, aprendí mucho muchísimo, y ahora como coordinador, donde sigo aprendiendo, incluso más. ¿He visto personas con talento? Sí. ¿Con ganas? También. Lo más difícil es que las ganas son fáciles de cuantificar, el talento, no. Creo que fue Bukowski quien dijo “el que resiste, gana”. Si lo dijo Bukowski…–¿Dónde aprende más, con sus alumnos en clase o en los eventos literarios que coordina?Aprendes cosas diferentes. Y no te creas que se aprende más compartiendo mesa con James Ellroy que con un autor desconocido por la mayoría. Eso no tiene nada que ver.–¿La gente que escribe, cuánto necesita leer? Con lo que veo, leo y escucho, a veces tengo la sensación de que –comparando lo que se publica con las estadísticas de lectura en nuestro país– hay más ganas de lo primero que de lo segundo.Para ser escritor, antes hay que ser lector. En el mejor caso, vas a ser tan buen escritor como tu mejor lectura. En mi despacho, el sillón de lectura tiene un lugar privilegiado. El ordenador, no.–¿Cree que las posibilidades de publicar por cuenta propia ha hecho caer en picado la calidad de la literatura, aunque sea una oportunidad para tantos desconocidos?Hoy en día, un escritor novel no debería obsesionarse con publicar en papel. Internet es una gran ventana. Por ella te puedes colar en la casa de millones de personas. Hay varios ejemplos de autores que lo han conseguido así.–¿Cómo es de optimista/pesimista ante el futuro de la literatura?Creo que los seres humanos no pueden vivir sin historias. Orales, escritas, audiovisuales y lo que esté por venir. La literatura te permite llegar donde las series o el cine no llegan. Y al revés: los libros no pueden competir con los efectos especiales. Son formatos distintos que están condenados a convivir.–No solo publica novela. Pedro Ramos toca otros géneros e incluso gusta de mezclar e integrar formatos. ¿Es necesario avanzar mucho más en la originalidad del mundo de la escritura y en general, en el de la cultura?No lo sé. En mi caso, hay historias que me piden otro tipo de recursos. Es divertido. Para mí, contar historias es un juego. –La disciplina es fundamental para escribir aunque se crea –a veces demasiado– en las musas. ¿Cómo combina usted estos dos apartados a la hora de trabajar?Picasso dijo que la inspiración existe, pero tenía que encontrarte trabajando. Yo me levanto todos los días a las 7 AM y me pongo a trabajar en el proyecto literario con el que esté en ese momento. Cuando estoy “en racha” me levanto a esta hora incluso los sábados y domingos. No conozco otra forma de hacerlo.–En su web desvela algunos de sus secretos, técnicas y recomendaciones. En el pasado no imaginábamos las posibilidades de la red para saber tanto. Aun así, siempre hubo y habrá genios de las letras. ¿Cree en esta capacidad innata de esa minoría?Claro, siempre habrá genios. Me encantaría conocer alguno y estudiar como funciona. Sería un buen contenido para mi web.–Poe, Machado, Cortázar son algunos de los autores que le han influido. Pero, ¿hay escritores actuales que le hayan impactado de manera especial?Muchos. Pero están vivos y prefiero no hablar de ellos. Luego te los encuentras por ahí y te piden que les invites a algo (risas) –Por ejemplo, ¿qué novela recomendaría de las que ha leído este año? A contraluz de Rachel Cusk. Vive en Inglaterra así que no creo que coincidamos.–¿Qué opina de la literatura juvenil? Hay escritores que cautivan a los adolescentes aunque los contenidos y la calidad no sean lo destacado. ¿Lo importante es leer, el entretenimiento sin más?Creo que la literatura juvenil tiene títulos maravillosos que quedan eclipsados por los éxitos comerciales. Igual que sucede en la literatura “de adultos”. Lo importante es encontrar un libro que conecte contigo y saber que hay muchos más ahí fuera. Los jóvenes que hemos sentido esto no dejaremos de leer nunca. Aunque también juguemos a los videojuegos.–Es pronto todavía pero, ¿algún deseo para 2019 en su carrera de escritor?Publiqué La playa de los cristales en el 2017. He publicado El coleccionista de besosy Tres mil noches con Marga en el 2018. Mi deseo es que siga la racha. Por eso mañana me levantaré a las 7 AM.