. Se sentía satisfecho de sí mismo: sabía que la mayoría de las personas deseaban una llama, un momento brillante en sus vidas, pero muchas se limitaban a envidiar la chispa de otros y a contemplar su brillo desde lejos por pura prudencia. Sin embargo, él había asumido todos los riesgos, y eso le había hecho más fuerte.
Eran las ocho menos cuarto de la mañana de un lunes del mes de febrero de 2014. Oliver preparaba el café, y acompañaba la tarea con un suave silbido, alegre e improvisado, que iba adaptando a la música que sonaba en su reproductor; ahora, James Blunt con su Bonfire Heart, que se amoldaba exactamente a sus pensamientos: por fin había llegado su turno. Sentía que estaba en el lugar correcto, en el momento adecuado y que solo él era el responsable de su situación. Esta libertad de pensamiento, de movimiento, le resultaba tan novedosa que solo en este período de su vida comprendía que antes, incluso en su pasado inmediato, había sido libre solo a medias, porque se había limitado a dejarse moldear por la corriente.
Llevaba ya más de medio año viviendo en Suances, un acogedor pueblo costero que se dibujaba en el mapa de Cantabria entre acantilados, prados y arena. Era londinense de nacimiento, aunque tenía el corazón dividido entre Escocia e Inglaterra. Oliver, que había cumplido treinta y seis años, había decidido arrojar por la borda su vida anterior para concederle un margen a la posibilidad de algo mejor, así que había abandonado Inglaterra para empezar de nuevo en Villa Marina, la magnífica mansión colonial que había heredado de su madre y que se encontraba a los pies de la recogida playa de la Concha(Un lugar a donde ir)María Oruña nació en Vigo en el año 1976, y actualmente sigue residiendo en su ciudad natal junto a su marido y su hijo. Es abogada laboralista y mercantil. Licenciada en Derecho desde el año 2002, ha prestado servicios legales a entidades bancarias y bufetes internacionales. Es Técnico Superior de Recursos Humanos, de Comercio Internacional y de Comercio Electrónico y Marketing.Realizó alguna pequeña colaboración en gallego en webs como www.galiciaencantada.com, publicando relatos históricos como el de A dama do vento.En el año 2013 decide publicar una novela de contenido jurídico, La mano del arquero, sobre el acoso laboral y el abuso de autoridad, basándose en distintos hechos reales y buscando ayudar a quienes se encontrasen en una situación similar.Inmediatamente después y aprovechando un cambio laboral, María Oruña decide escribir su primera novela de misterio, Puerto Escondido, ambientada en Cantabria y publicada en septiembre de 2015 por la Editorial Destino (Planeta), cosechando un inmediato éxito de ventas y crítica y traduciéndose en varios idiomas.En febrero de 2017 publica de nuevo con la Editorial Destino la novela Un lugar a donde ir, que de inmediato recibe de nuevo excelentes críticas, tanto de blogs literarios en RRSS como de prensa especializada. Este nuevo trabajo rescata algunos de los personajes de su novela anterior, encontrándonos ante una potencial saga o serie en la que las investigaciones son realizadas por Valentina Redondo, teniente de la Guardia Civil, y su Sección de Investigación.En la actualidad, María Oruña sigue escribiendo y ejerciendo la abogacía, aunque su principal actividad comienza a ser la vinculada a la literatura.