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Su padre, próspero terrateniente, fue alcalde de Nuoro y también un poeta aficionado. La madre, mujer extremadamente religiosa, educó a sus hijos en la severa moral de la religión católica.
A los 10 años y tras recibir clases de educación primaria en su ciudad natal, continuó sus estudios en casa, pues las costumbres de la época así lo dictaban para las mujeres. Prolongaría su formación, de manera autodidacta, estudiando literatura.Su familia sufrió numerosas desgracias que ella contaría en su autobiografía, donde narra su vida desde su nacimiento hasta su matrimonio. Esta obra, un manuscrito encontrado por sus familiares a la muerte de la escritora, se publicaría por entregas de manera póstuma a partir de septiembre de 1936, con el título de Cosima, quasi Grazia.En 1899, durante su estancia en Cagliari, la capital de Cerdeña, en casa de la directora de la revista “Vita sarda”, conoce a Palmiro Madesani, empleado del Ministerio de Hacienda, con quien se casó cuatro meses después, con casi treinta años. El matrimonio se traslada a vivir a Roma, y allí vivió hasta el día de su muerte. Tuvieron dos hijos, Francesco y Sardus.Su marido apoyaría sin fisuras su carrera literaria, ejerciendo de agente y promotor socio-cultural de su mujer. Grazia siempre agradeció esta atención y declaraba que la mitad de su éxito se la debía a su esposo.Empezó a destacar como escritora con algunos relatos que publicó la revista “L’ultima moda”. Su primera obra de éxito fue En el azul. Sus historias suelen tener lugar en Cerdeña y hablan de la vida y costumbres de la gente sencilla, muchos de ellos marginados de la sociedad. Oscilan entre la narrativa y la poética, siempre con un fuerte vínculo entre lugares y personas, entre los estados de ánimo y el paisaje. De esta primera época podemos destacar Paisajes sardos.Ya en Roma, poco a poco, la crítica empieza a interesarse por sus novelas y, en 1903, con la publicación de Elías Portolu, en la que evoca la Cerdeña decadente de principios del siglo XX, su mundo primitivo y cerrado, la sociedad arcaica e inmovilista, y sus personajes de una moralidad sumamente convencional; su consagración como escritora es definitiva. Empiezan los éxitos, tanto narrativos como dramáticos, con obras como Cenizas, La hiedra, Hasta el límite, Colombi e Sparvieri, Cañas al viento, El incendio en el olivar o El Dios de los vientos. Su novela Cenizas sería llevada al cine en 1916.Tuvo una carrera literaria incansable y frenética. Sus libros no dejaban de venderse por todo el mundo y, en 1926, la Academia Sueca le otorgó el mayor reconocimiento a su larga carrera como escritora: el Premio Nobel de Literatura.Grazia Deledda escribió hasta el final de sus días, publicando más de sesenta obras, más de un libro por año, en su mayoría novelas.